NUESTRO LAZO ETERNO CON JERUSALEN E ISRAEL

Nuestro lazo eterno con Jerusalén e Israel Un llamado a los nuestros. Hace más de 3,000 años que el rey David estableció a Jerusalén como la capital de Israel. Ninguna otra nación puede reclamar lo mismo de su ciudad capital. La conexión del judío con su Tierra no puede compararse con ningún otro pueblo y su nación. Ningún otro pueblo posee un Título de Propiedad o promesa relacionada con su país. El de ellos es un mero vínculo terrenal que no se caracteriza por lazos sagrados ni espirituales; y su única relación con su patria se debe a que sus antecesores se establecieron allí. Siempre que un pueblo o una familia se trasladaban de un país a otro, muy pronto se divorciaba por completo del mismo. Pero este no es el caso del pueblo judío, cuyo Título de Propiedad de su tierra está en la Biblia. La santidad de Eretz Yisrael es eterna; y por esta razón los patriarcas anhelaban morar en ella aun antes de que existiera el pueblo judío. Abraham se ausentó de ella sólo en tiempo de hambruna. Isaac nunca la abandonó y Jacob paso parte de su vejez en Egipto y cuando murió fue sepultado en Israel. Más tarde Jacob y José imploraron a su familia que llevaran sus huesos a la Tierra Santa. ¡Y con cuanta pasión Moisés le rogó al Todopoderoso entrar a la Tierra Prometida! Cuando el pueblo de Israel fue desterrado a Babilonia, hicieron el juramento: “Si te olvidare, oh Jerusalén, olvide mi diestra su destreza. Adhiérase mi lengua al paladar si no te recordare, si no pusiere a Jerusalén por encima de mi mayor alegría” (Salmo 137). En tiempos de antaño, los inmigrantes a la Tierra Santa arriesgaban sus vidas al asentarse en una de las cuatro ciudades santas de Safed, Tiberias, Jerusalén y Hebrón. Llegaban en frágiles embarcaciones, a veces en travesías de hasta doce meses. Si en ese entonces, el trayecto hubiese sido tan fácil como ahora – o si los judíos de hoy estuvieran motivados por el intenso amor a la Tierra que inspiró a sus predecesores – Israel estaría hoy poblada mayormente por judíos observantes. Nuestro gobierno hubiese estado dominado por hombres conscientes del fundamento religioso del Título de Propiedad de nuestra patria. Tampoco habría la degradación de los valores judíos ni la desconexión de nuestra preciosa herencia. Israel y el pueblo judío se enfrentan a una lucha crítica por la supervivencia. Es la primera vez desde que se fundó el Estado, que la población civil de Norte a Sur se encuentra bajo amenaza de ataques de misiles. Se acerca la hora decisiva. El mundo entero se está convulsionando y las fortunas privadas se están esfumando. Dios te da la oportunidad de venir a conocer a Israel la riqueza de Israel cultural y bíblicamente hablando. Isaías 60:1-5 Levántate, resplandece; porque ha venido tu luz, y la gloria de Jehová ha nacido sobre ti. Porque he aquí que tinieblas cubrirán la tierra, y oscuridad las naciones; mas sobre ti amanecerá Jehová, y sobre ti será vista su gloria. Y andarán las naciones a tu luz, y los reyes al resplandor de tu nacimiento. Alza tus ojos alrededor y mira, todos éstos se han juntado, vinieron a ti; tus hijos vendrán de lejos, y tus hijas serán llevadas en brazos. Entonces verás, y resplandecerás; se maravillará y ensanchará tu corazón, porque se haya vuelto a ti la multitud del mar, y las riquezas de las naciones hayan venido a ti.