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Evang Hector L Vazquez
on June 22, 2023
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Beraja bendición
El orgullo nos aleja de Dios.
Por Evangelista Héctor L Vázquez director de esta página.
Abdías 1:4
Si te remontares como águila, y aunque entre las estrellas pusieres tu nido, de ahí te derribaré, dice el Eterno.
La biblia nos habla en el libro de Ezequiel capítulo 28 versos del 13 al 19 de un querubín protector l que se le dio el privilegio de estar en lo más cerca del Señor nuestro Dios de lo que usted puede imaginarse En Edén, en el huerto de Dios, cubierto de cuanta piedra preciosa usted se puede imaginar pero el orgullo vanidad y codicia entro en él, dice en Ezequiel 28:17 NVI 1999) A causa de tu hermosura te llenaste de orgullo. A causa de tu esplendor, corrompiste tu sabiduría. Por eso te arrojé por tierra, y delante de los reyes te expuse al ridículo. Pero lo extraño que no existiendo la maldad en el entro la codicia, la avaricia y de abusar de la posición de confianza que se le había dado hasta querer llegar más alto de la posición que tenía para ser como si fuera Dios. Pero no tan solo llego hasta hay sino que puso división dentro de la creación en el cielo de Dios. Siempre que yo veo esto pienso en que muchos quieren ser caciques y muy pocos quieren ser indios. Por eso el Eterno busco un lugar entre la galaxia y la vía láctea y en todo el espacio sideral y en este donde usted y yo vivimos entre los 9 planetas el escogió uno y coloco como dice génesis 1 y la biblia dice que lo habito lo pobló y lo hizo habitable para que usted y yo viviéramos y ahí coloco al hombre. ¿Cuán lejos o cuan cerca estamos del cielo de Dios?
El apóstol Pablo nos habla del tercer cielo llamado paraíso y dice en 2 Corintios 12:2-4 Conozco a un hombre en Cristo, que hace catorce años (si en el cuerpo, no lo sé; si fuera del cuerpo, no lo sé; Dios lo sabe) fue arrebatado hasta el tercer cielo. Y conozco al tal hombre (si en el cuerpo, o fuera del cuerpo, no lo sé; Dios lo sabe), que fue arrebatado al paraíso, donde oyó palabras inefables que no le es dado al hombre expresar. Pero nuestro Dios nos lo hizo más fácil que estamos tan cerca como un tiro de piedra a través de Jesucristo tenemos libre acceso al Padre en cuestión de mucho menos que segundos.
Y aquello que paso en el cielo de Dios se le llamo rebelión, pero todavía en nuestro siglo 21 existe lucha por el poder y es tan así que la nasa gasta millones de dólares creando sondas espaciales que viajan por el espacio tratando de encontrar algo nuevo. En una ocasión se dice que una sonda espacial llego a lo que ellos creen que era el cielo de Dios, pero sabes que esa sonda fue enviada de vuelta para atrás con un mensaje de 12 segundos de duración con una voz que parecía de millares de barítonos como millares de muchas aguas donde decía Yo le he dado un planeta con todo lo que ustedes necesitan dentro de él y continuo diciendo el cielo este lugar es Mío, en otras palabras es que aquel lugar es santo y nadie que no sea santo podrá estar allí.
Pero recuerda el gusanito de la avaricia la codicia o el querer tener más de lo que te corresponde es algo peligroso en tu vida. Dios dice en su palabra todo aquel que ostente algo más de lo que está establecido será derribado y que cuando Cristo venga a levantar su iglesia todo esto será cosa del pasado. Hubo un hombre en la biblia llamado Balaam que quiso más que el conocimiento la riqueza pero el Eterno paro sus malos caminos para que con sus palabras trajera al pueblo de Israel una bendición en vez de una maldición. Números 23:7-10 RV 1960
(7) Y él tomó su parábola, y dijo: De Aram me trajo Balac, Rey de Moab, de los montes del oriente; Ven, maldíceme a Jacob, Y ven, execra a Israel.
(8) ¿Por qué maldeciré yo al que Dios no maldijo? ¿Y por qué he de execrar al que Yahweh no ha execrado?
(9) Porque de la cumbre de las peñas lo veré, Y desde los collados lo miraré; He aquí un pueblo que habitará confiado, Y no será contado entre las naciones.
(10) ¿Quién contará el polvo de Jacob, O el número de la cuarta parte de Israel? Muera yo la muerte de los rectos, Y mi postrimería sea como la suya.
Porque lo que nos prometió fue cielo nuevo y tierra nueva donde no habrá rebelión. Beraja bendición. Que el Espíritu Santo nos ayude a entender esta palabra.
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