simon de cirene

Beraja Bendición Simón cirineo me ayudo a cargar mi cruz Por evangelista Héctor L Vázquez Shalom A veces cuando siento en mi propio cuerpo los dolores de una artritis crónica y más cuando ese dolor esta los 365 días del año sin quitarse del cuerpo pienso en Cristo mi Señor y mi mente se eleva al libro de Isaías 53:5 Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados. En medio de la multitud Jesús dice al pueblo mi tiempo ha llegado y me entregaran en manos de gentiles Marcos 10:33-34 He aquí subimos a Jerusalén, y el Hijo del Hombre será entregado a los principales sacerdotes y a los escribas, y le condenarán a muerte, y le entregarán a los gentiles; y le escarnecerán, le azotarán, y escupirán en él, y le matarán; más al tercer día resucitará. . Esos azotes que recibió el que ama mi alma y con todo mi corazón y con todas las fuerzas de mi espíritu, pienso que cada latigazo que se le dio en su cuerpo fue por mí y por más de lo que yo padezco Muchas veces nosotros necesitamos a un Simón cirineo escogido en la multitud para ayudar a llevar la carga de la cruz hacia el calvario Mateo 27:32 Al salir, hallaron a un cireneo llamado Simón, y lo obligaron a llevar la cruz. Lo cansado y lo agotado de los días finales en la tierra que estaba a punto terminar con su crucifixión. Simón Cirineo hizo que la carga de la cruz fuera un poco más liviana aunque para Yeshúa fue de gran ayuda todos necesitamos en algún momento en nuestras vidas que alguien nos ayude con una palabra de aliento un apretón de mano o un espaldarazo, quizás con un beso o un abrazo o una palabra de vida de las sagradas escrituras que nos levante el ánimo. Muchas veces estando entre multitudes de gente nos sentimos tan solos pero que lindo seria que en la soledad nos sintamos bien acompañado. Porque cuando Jesús toma todo nuestro entorno la soledad se convierte en gozo en baile y alegría, nos sentimos sostenidos de la mano derecha del que está sentado a la derecha del padre. Yo soy dame la mano no te tardes el tiempo y el oxígeno se acaba Shalom